Subida al Santuario de la Virgen de la Cabeza

Subida al Santuario de la Virgen de la Cabeza

Después de un año hemos vuelto a ver a «La Morenita»,
Lo habíamos hablado hace una par de semanas para ir, aprovechando el descanso del sábado de Santi.
El viernes a eso de las siete de la tarde, me llama al móvil para confirmar que nos veríamos a las siete y cuarto de la mañana del día siguiente. Y así fue.
A esa hora en la «furgo» de Santi nos montamos con dirección a Andújar, con la parada de rigor para desayunar.
Nuestra sorpresa fue cuando llegamos a Andújar y vimos a más de quinientos (y no exagero) mulos y caballos que se disponían a subir al Santuario celebrando una convivencia de cofradías
Ya con las bicis, nos fuimos dirección a Marmolejo para subir por el GR-48 (Camino del Santuario), parándonos en el Balneario que estaba cerrado por inundación de las últimas lluvias.

Entrada al balneario


Durante la subida fuimos pasando a bastantes colegas que llevaban nuestra dirección.
Una vez pasado el puesto de control de Lugar Nuevo y después de la bajada, hicimos nuestro primer avituallamiento, viendo algunas “pepas”.
Continuamos nuestro camino y pasada la segunda puerta (salida del Lugar Nuevo) y después de una pequeña subida, el camino se desvía hacia la izquierda por el GR-48 (vía pecuaria) dejando el sendero principal, siendo obligatorio desviarse ya que está cerrado más adelante en la entrada del abrevadero con una puerta con candado.
Al llegar al abrevadero, ya se notaba la berrea, había bastantes machos con su grupo de hembras, que al vernos, se alejaron un poco del camino, donde pudimos contemplarlos.

Aprovechando la parada para reparar un pinchazo


En este punto, paramos y aprovecho para cambiar la cámara trasera, que venía perdiendo presión motivado por un pellizco.
Volvemos a entrar de nuevo en Lugar Nuevo, donde vimos gran cantidad de ciervos y gamos que se cruzaron en nuestro camino.
Siguiendo nuestro camino, a las doce menos cuarto estábamos entrando en el Santuario, donde después de visitar a la Señora, bajamos para tomarnos nuestro bocata con una cervecita para reponer los hidratos de carbono que habíamos perdido.
Bajamos Los Caracolillos y en la explanada que hay junto al Jándula, estaba saturado de romeros con sus peroletes en marcha.
A partir de aquí y subiendo Los Madroños, comenzamos a cruzarnos con muchísimas personas que venían andando, así como bastantes caballistas, los cuales nos dijeron que no deberíamos bajarnos por el camino porque venías subiendo muchísimos caballos.
Hasta San Ginés, nos cruzamos con muchísimos grupos de caballistas donde estaban concentrados y haciendo una parada en el camino para comer.

Multitud de caballistas en la Ermita de San Gines


Intentamos bajar por el camino, pero fue imposible, la gran cantidad de caballistas que subían, nos impedían poder continuar, dimos la vuelta y nos bajamos de San Ginés a Andújar por la carretera de las Cadenas.
A nuestra llegada, a reponer sales y vuelta hasta Córdoba, que por la tarde había futbol.
Deseando volver al Santuario, a comteplar a la Madre de Dios